No es que me queje, es que estoy envenenado. No sé si poner el coche a nombre de un pariente y pagar el “Rodaje” a Gallardón en Madrid, o quemarlo en la Plaza Mayor y que me perdone Churriguera. No es posible vivir en la Zona de la ORA y no tener derecho a aparcar en ella. ¡Absurdo! Por mi trabajo a turnos salgo y llego a casa a horas intempestivas es decir que no hay medios de transporte a mi disposición y tengo que recorrer varios kilómetros “a pata”. Mientras tanto mi coche vegeta a varios kilómetros de mi domicilio convirtiéndose en un objeto inservible. Cuando tengo la suerte de aparcar a 400 o 500 m. de mi domicilio me niego a moverlo durante semanas por el canguele que me entra si pierdo la “plaza”. A mi entender la regulación de la ORA debe estar primero supeditada al interés de los residentes (que no interesan, hay poca grasa). En fin, es patético salir a las seis de la mañana y ver las calles adyacentes a mi casa vacías de coches, esperando a los paganos diarios que alimentan las máquinas tragaperras de la ORA y yo como un postcrito apestado no pueda dejar el coche ni pagando. Deseo que algún día cambie el Gobierno municipal esperando que otro sea sensible a las necesidades del ciudadano y no a otros mezquinos intereses recaudadores.
SALUDOS
M. Vicente